El juego heurístico es una actividad plenamente consolidada en la etapa de Educación Infantil de nuestro centro desde hace años. Concebido por la investigadora inglesa Elinor Goldschmied, el juego heurístico no es una receta, es un enfoque que propicia el aprendizaje individual genuino en el que cada niño, cada niña hace sus propios descubrimientos. Cada sesión del juego heurístico se plantea como una situación de juego en el que los niños y niñas van descubriendo a través de los sentidos, las características y cualidades de los objetos que manipulan y las relaciones que existen entre ellos.

Cada uno dispone de un conjunto de objetos y materiales de la vida cotidiana para que se pregunte ¿qué puedo hacer con esto? Consiste, por tanto, en una invitación para investigar, experimentar, percibir, realizar hipótesis y hacer comprobaciones a través de la acción y la manipulación de los distintos objetos disponibles. Cada acción que el niño o la niña realiza contribuye al desarrollo del pensamiento matemático de muy diversas maneras como, por ejemplo, permitiendo la exploración de su entorno cercano, identificando las cualidades de los objetos y estableciendo relaciones entre ellos (agrupándolos, clasificándolos, etc.) o induciendo  algunas leyes físicas como el equilibrio o la  gravedad,  tan importantes para el desarrollo de su innato deseo por la exploración científica.

Disponer de material abundante y perfectamente ordenado lo vuelve accesible. Las alfombras individuales acogen la colección de objetos que el alumnado empleará, individualmente y en silencio, con total libertad.

La actividad desarrollada pone en marcha procesos intelectuales  de una enorme potencia que no terminan con la sesión propiamente dicha de juego heurístico, sino que continúan en el aula ordinaria mediante el diálogo mantenido con la maestra y que aportarán enormes beneficios a todas las niñas y los niños. 

El juego heurístico encuentra en la indagación dialógica, en la investigación compartida, su desarrollo natural.